El día que la luz azul nos robó el sueño (y cómo recuperarlo)

Gafas para dormir: ¿realmente ayudan a bloquear la luz azul y mejorar el sueño?


Durante casi 300.000 años, los seres humanos vivíamos en sincronía con el sol.
El día era para la actividad, la noche para el descanso.
Nuestro reloj biológico (los llamados ciclos circadianos) se adaptó perfectamente a ese patrón de luz y oscuridad.

Todo cambió en 1879, cuando Thomas Edison patentó la bombilla incandescente.
La humanidad ganó más horas de trabajo, más seguridad, ocio nocturno…pero nuestro reloj biológico empezó a desajustarse.

Realmente,el verdadero impacto llegó con la luz LED y el uso masivo de pantallas a principios de los años 2000
Hoy vivimos rodeados de luz artificial a todas horas, y nuestro cuerpo recibe señales contradictorias que alteran el sueño.


¿Qué son los ciclos circadianos y cómo influyen en el sueño?

Los ciclos circadianos son ritmos internos de unas 24 horas que regulan funciones como el sueño, la temperatura corporal, la liberación de hormonas o el rendimiento cognitivo.

La principal señal que regula estos ritmos es la luz.

  • Con luz, el cuerpo se activa.

  • Con oscuridad, se produce melatonina, la hormona que prepara al organismo para descansar.

El problema es que la luz azul que emiten las pantallas y los LEDs (especialmente entre 460 y 480 nm) puede inhibir la producción de melatonina, retrasando el sueño y afectando a su calidad.

¿Y por qué pasa esto?

En la retina tenemos unas células especiales —las células ganglionares fotosensibles— que no sirven para ver, sino para avisar al cerebro de cuánta luz hay a nuestro alrededor. Estas células contienen un pigmento llamado melanopsina, muy sensible a la luz azul.

Cuando reciben esa señal (luz azul entre 460 y 480 nm), envían un mensaje directo al reloj interno del cerebro diciéndole: “¡Es de día, mantente despierto!”
Como respuesta, la glándula pineal deja de liberar melatonina, la hormona que nos prepara para dormir.

El resultado: aunque sea medianoche y estés en pijama, tu cuerpo cree que todavía es pleno día.
Y así es como una simple pantalla puede alterar todo tu ciclo natural de descanso.

Melatonina: la hormona clave del descanso

La melatonina no es un somnífero, pero funciona como un marcador temporal que sincroniza al cuerpo con el ciclo de luz y oscuridad.

Cuando se libera con normalidad:

  • baja la temperatura corporal,

  • reduce el estado de alerta,

  • y facilita conciliar y mantener el sueño.

¿Qué son las gafas para dormir?

Las llamadas gafas para dormir o gafas con filtro azul son lentes especiales diseñadas para bloquear la luz azul emitida por móviles, tablets, ordenadores, televisores y bombillas LED.

Al reducir la entrada de estas longitudes de onda, permiten que la melatonina se libere con normalidad y el cuerpo mantenga sus ciclos circadianos sin tanta alteración.

¿Todas las gafas para dormir funcionan igual?

No.
No basta con que la lente sea naranja o roja, que se ha puesto tanto de moda.

Lo importante es el filtro selectivo y el rango de bloqueo.

Los modelos realmente eficaces bloquean la franja crítica por debajo de los 500–511 nm.
Si el filtro no llega a ese corte, las gafas pueden ser bonitas… pero no harán gran cosa por tu melatonina.

 


 

¿Qué dice la ciencia sobre las gafas para dormir?

La investigación científica muestra que:

  • Los filtros adecuados pueden reducir la supresión de melatonina nocturna entre un 15 % y más del 50 %.

  • Los usuarios reportan mejoras en el inicio del sueño y en la sensación de descanso.

  • Aun así, la evidencia es limitada: no todos los filtros ni todos los estudios coinciden en resultados, por lo que no son una solución mágica.


Qué pueden (y no pueden) hacer las gafas para dormir

Pueden ayudar:

  • A quienes usan pantallas antes de dormir.

  • A personas con insomnio leve o sueño irregular.

  • A trabajadores a turnos con horarios alterados.

No pueden:

  • Sustituir una buena higiene del sueño.

  • Reemplazar un tratamiento médico en casos severos.

  • Justificar pasar la noche entera enganchado a las pantallas.

Cómo elegir gafas para dormir de calidad

Si quieres probar este tipo de gafas, fíjate en:

  • Que indiquen el rango de bloqueo de luz azul (idealmente < 511 nm).

  • Que sean cómodas y ligeras.

  • Que los filtros sean reales, no simples tintes de color.

  • Que cuenten con asesoramiento profesional.


Conclusión

Las gafas para dormir pueden ser un complemento útil para mejorar el descanso en un mundo iluminado 24/7.
No son milagrosas, pero bien elegidas ayudan a reducir la exposición a la luz azul y a respetar nuestro reloj biológico.

La clave está en verlas como una herramienta más, junto a hábitos saludables: reducir pantallas antes de dormir, mantener rutinas regulares y cuidar el entorno luminoso nocturno.


En Óptica Divergente cuidamos tu descanso visual en Bueu

Si notas fatiga visual, dificultad para conciliar el sueño o molestias tras pasar muchas horas frente a pantallas, en Óptica Divergente, tu óptica en Bueu (Pontevedra) te ayudamos a proteger tu vista y tu descanso.

Como optometristas especializados en salud visual y luz azul en Bueu, te daremos las mejores recomendaciones sobre gafas con filtro azul, adaptadas a tu estilo de vida, y te orientamos en hábitos de higiene visual y descanso para mejorar la calidad de tu sueño.

 

Regresar al blog

Deja un comentario

Ten en cuenta que los comentarios deben aprobarse antes de que se publiquen.